Capítulo 3
Capítulo 3
Capitulo 3 Flynn habia pulsado el boton del ascensor. Cuando las puertas se abrieron, Clara entr6 sin pensarlo dos veces.
Flynn le lanz6 una mirada de reojo mientras se arreglaba la camisa frente al espejo, su tono fue casual al responder, “No voy a encargarme de tu caso“—
Clara sintio frio en sus manos y pies. Obviamente, Flynn ya sabia lo que pasaba en su casa! Después de un breve momento de vacilacién, pregunté en voz baja, “; Rati te advirtid sobre esto?”
Flynn la miré a los ojos en el espejo y sonrié ligeramente. “No tiene tanto poder! Sefiorita Castillo, simplemente prefiero mantener mi trabajo y mis asuntos personales separados.”
Clara entendio su punto, si ella queria tener un revolcén emocionante, él estaba dispuesto, pero si involucraba asuntos de trabajo, mejor no. Se sintid un poco avergonzada.
Flynn no la presiono. Aunque Clara era de su agrado, no era suficiente para que hiciera una excepcion. Ademas, durante el dia, no estaba de humor.
Después de unas pocas palabras, el ascensor lleg6 al piso 28. La secretaria de Flynn estaba esperando en la puerta, se sorprendio al ver a Clara, pero su profesionalismo impidié que se descompusiera y dijo respetuosamente, “Abogado Bécquer, José Bernal ya ha llegado.”
Flynn lelanz6 su chaqueta a la secretaria, indicando, “Llévala a la tintoreria,” La secretaria se fue, siguiendo sus instrucciones.
Flynn revis6 su teléfono mientras le decia a Clara de manera casual, “;Deberias buscar a otro abogado!... Ademas, no deberias regalar tu cuerpo tan facilmente.” Dicho esto, salié del ascensor.
Clara penso que era un hipocrita incomprensible.
Clara habia intentado de todo para ver a Flynn pero habia sido rechazada por él. Maite en casa se estaba volviendo cada vez mas ansiosa, quejandose constantemente, asi que Clara estaba bajo mucha presion y decidié reunirse con su amiga de la universidad, Lola Bernal.
Lola se habia casado justo después de graduarse, con un hombre rico de Bogota, su circulo social era amplio. Clara le pidid que le ayudara a pensar en una solucion.
Las dos se encontraron en una cafeteria, Clara le cont6 todo a Lola. La chica maldijo a Ratil y después de desahogarse, pregunto: “;Casi te acostastePublished by Nôv'elD/rama.Org.
con Flynn esa noche?”
Clara se ruborizo y comenzé a juguetear con su café.
Lola susurr6, “jClara, te pasaste! Flynn tiene muy buen gusto, rara vez tiene escandalos.” Ella sonrid amargamente, “No tenia otra opcidn, de lo contrario no te estaria molestando.”
Flynn tenia mucho poder en ese circulo y si Lola la ayudaba, seria facil ofenderlo. Pero Lola era leal, usé algunas de sus conexiones para obtener la agenda de Flynn.
El sabado a las tres de la tarde, Flynn tenia una cita para jugar golf en el club. Clara fue con Lola y su esposo y para su sorpresa, vio a Raul alli. Clara se qued6 paralizada. Lola le dio un fuerte pellizco a su esposo, quejandose, “;No deberias haber averiguado bien? 4Cdomo va a relajarse Clara si Ratil esta aqui?”
El esposo de Lola se disculp6 sinceramente, “jClara, lo siento! No pregunté bien.”
Justo cuando Clara iba a hablar, Flynn ya los habia visto. Vestia casualmente de blanco, con su alta estatura y su rostro apuesto, destacaba entre la multitud. Actué como si no conociera a Clara, simplemente salud6 al esposo de Lola.
El esposo de Lola, un hombre muy honrado, respondi6 con una sonrisa brillante, “Abogado Bécquer, traje a unas amigas para jugar.”
Fue entonces cuando Flynn parecio notar a Clara. Ella, que ya tenia una piel hermosa, se habia vestido especialmente fresca ese dia. Llevaba una camiseta blanca suelta con unos shorts deportivos de color gris claro. Su largo cabello castafio estaba recogido en un mofio, luciendo juvenil y un poco coqueta.
La mirada de Flynn paso por las largas piernas de Clara y luego dijo casualmente: “No creo haber conocido a esta sefiorita antes...”